Cuando la señorita Acacia anuncia que sus alumnos van a tener clases de enriquecimiento con otra de necesidades especiales, hay diferentes reacciones. Pero los chicos con necesidades especiales les enseñan una lección valiosa.
TEMA
Somos hechura de Dios.
VERSÍCULO PARA MEMORIZAR
Efesios 2:10
Pues es Dios quien nos ha hecho; él nos ha creado en Cristo Jesús para que hagamos buenas obras, siguiendo el camino que él nos había preparado de antemano.
NOTAS
Puedes sentirte incómodo al encontrarte con alguien que tiene una discapacidad. Nos preguntamos, ¿qué decimos? ¿cómo actuar? El punto de este episodio es mostrar que chicos con discapacidades son como todos los demás. Tienen sentimientos, les gusta estar con otros chicos, y tienen aficiones y otros intereses. Ellos pueden necesitar un poco de ayuda, pero tienen mucho que aportar cuando se les da una oportunidad.
También tienen algo que aportar al reino de Dios. Dios tiene un plan y un propósito para cada uno de nosotros. Las personas que no son como nosotros, que tienen necesidades especiales, nos enseñan paciencia, generosidad, amor y desarrollan en nosotros un corazón de siervo.
¿Conoces a una familia con un familiar discapacitado? Probablemente sería bienvenida una invitación a interactuar con tu familia. ¿Puedes invitarlos a cenar, o para una noche de juegos? Descubre lo que les gustaría hacer y luego haz tus planes. Puede ser difícil e incómodo al principio, pero el esfuerzo valdrá la pena. Esto ayudará a tus hijos ser auténticos discípulos de Jesús.
PRÁCTICA
¿Escuchaste bien esta historia?
P. Qué iban a aprender hacer en la clase de necesidades especiales?
R. A hornear, cocinar, coser.
P. ¿Quién fue la compañera de Lucila?
R. Talia Tortuga.
P. ¿Qué era su “necesidad especial”?
R. Talia tenía problemas en hablar y escribir.
P. ¿Cómo tomaba Talia notas en clase?
R. Grababa en su computadora.
P. ¿Cuál era el nombre de la asistente para la clase de necesidades especiales?
R. Señorita Terrapín.
BUENA PREGUNTA
Esta pregunta es para ayudar a los niños a desarrollar un conocimiento bíblico de Dios. El propósito es ayudar a los padres a guiar la conversación hacia un entendimiento bíblico. Le recomendamos que use una Biblia abierta en esta conversación.
P. ¿Qué valora Dios? ¿La capacidad para hacerlo todo nosotros mismos? ¿Nuestra linda apariencia o capacidad física?
R. Dios valora nuestros corazones, cómo somos por dentro (1 Samuel 16:7). ¿Amamos a Dios? ¿Amamos a los demás? El Rey David tenía todo lo que una persona puede ofrecer, era de buen parecer (1 Samuel 16:12), tenía habilidad física (1 Samuel 17:36, 50), inspiraba a otros a seguirlo (1 Samuel 22:1-2). Pero eso no es lo que lo calificó para ser rey. Fue su amor a Dios que lo calificó para ser rey (Hechos 13:22). ¿Qué ve Dios cuando mira a tu corazón?
¿Y QUÉ?
Si no ponemos en acción lo que escuchamos, no aprendemos, por lo que esta actividad tiene como objetivo motivar a acción lo que hemos aprendido acerca de Dios y su deseo para nosotros.
¿Hay alguien en tu familia o en tu clase en la escuela que tiene necesidades especiales? Haz algo esta semana para mostrar bondad hacia esa persona.
VERSÍCULO
Efesios 2:10
Pues es Dios quien nos ha hecho; él nos ha creado en Cristo Jesús para que hagamos buenas obras, siguiendo el camino que él nos había preparado de antemano.
NUESTRO LUGAR EN LA HISTORIA DE DIOS
¿Alguna vez has conocido a alguien muy diferente de ti? ¿Fue difícil saber qué decir o hacer? Entonces debes ver cómo el rey David manejó esta misma situación.
El rey David era el líder elegido por Dios para Israel. Había conquistado los países vecinos, estableció su capital, y construyó un hermoso palacio para su familia. ¡Él era el rey!
Mefi-bóset era muy diferente. La mayor parte de su familia había sido asesinada en una feroz batalla cuando tenía sólo 5 años. El mismo día en que su familia fue asesinada, Mefi-bóset se cae accidentalmente. Sus dos piernas quedaron tan dañadas que nunca volvería a caminar. Porque era cojo y su familia había muerto, no tenía trabajo. No tenía donde vivir a menos que otro israelita lo dejara vivir con él.
Entonces, un día, cuando Mefi-bóset había crecido, fue convocado al encuentro del rey David. Debe haber estado muy asustado. Mefi-bóset era tan diferente del rey, ¿de qué podrían hablar?
¿De qué hablaron el rey de Israel, y un hombre discapacitado? Fueron respetuosos el uno con el otro. Fueron amables el uno con el otro. Comenzaron a hablar de algo que ambos tenían en común, el difunto padre de Mefi-bóset era Jonathan, quien había sido el mejor amigo de David. Después de la conversación, el rey David invitó a Mefi-bóset a vivir en el palacio y comer en la mesa del rey David. Mefi-bóset pasó el resto de su vida apoyando a David como su rey.
Entonces, ¿qué puedes hacer la próxima vez que encuentres a alguien que es muy diferente de ti? Sé respetuoso. Sé amable. Busca algo que tengan en común. ¡Puedes encontrar un nuevo amigo!